lunes, 2 de marzo de 2015

LOS VENGADORES: LA ERA DE ULTRÓN

Brian Michael Bendis llegó a Marvel a comienzos de siglo y, junto a Mark Bagley, inauguró el Universo Ultimate con su versión definitiva de Spider-Man. Fruto del éxito de esta colección, el guionista saltó al Universo Marvel tradicional, y desde entonces, su peso en los grandes planes editoriales se ha visto incrementado con el paso del tiempo. La disolución y posterior relanzamiento de los Vengadores, Dinastía de M, Secret War, Invasión Secreta, Reinado Oscuro… Una larga lista de eventos y aventuras que llegaría a su final con la sustitución de Jonathan Hickman al frente de sus Vengadores. Así, el último gran evento de Bendis en esta Marvel claramente influienciada por sus guiones y su grupo vengador fue en el verano de 2013; Los Vengadores: La Era de Ultrón.

Más cerca que nunca de lograr su ansiado objetivo de aniquilación, Ultrón ha sustituidos los rascacielos y avenidas de Nueva York por toneladas de escombros y ha reducido a los seres humanos a su mínima expresión, salvándose únicamente aquellos que se mantienen ocultos de los robots Ultrón que patrullan las calles. A pesar de ello, una pequeña resistencia de superhéroes se encuentra guarecida en un refugio oculto diseñado por el desaparecido Nick Furia para ocasiones de emergencia. Con el fin de sus días más cerca que nunca, esta última guarnición superhéroica se verá obligada a salir de su escondite y ponerse en marcha para evitar la erradicación a manos de Ultrón.

Este es el contexto en el que arranca la trama de Bendis, un cruento plantel en el que nuestros héroes tienen menos oportunidades de sobrevivir que nunca… Pero, al poco tiempo de comenzar la aventura explorando la vida de los supervivientes en la Nueva York de Ultrón, Bendis realiza un rápido cambio de planes que desplazará este apocalíptico contexto a un secundísimo plano en busca de nuevas oportunidades con las que alargar este evento.

Con dicho fin, el guionista tirará de la imaginación de Claremont y Byrne al tomar una clara influencia de X-Men: Días del Futuro Pasado para hacer de los viajes temporales y sus consecuentes paradojas piezas claves en este cómic. Desviándose completamente de lo que se anunciaba en el título del evento, el guionista relega al olvido al villano Ultrón (aunque su presencia anterior tampoco había sido de gran peso) para llevarnos a diferentes realidades y, una vez allí, comenzar a plantear y desarrollar tramas secundarias que poco o nada tienen que ver con la historia principal.


Desde el primer momento, nos encontramos con un cómic falto de ideas, mal ejecutado, alargado en exceso y con errores argumentales destacables... A esto se le añade la pésima labor del guionista con los personajes. Como todo buen evento superheróico, el cómic cuenta con una gran cantidad de personajes, como el Capitán América, Iron Man, Luke Cage, Spider-Man, Caballero Luna, Ojo de Halcón, Hulk Rojo, Lobezno, Sue Richards… Además de alguna que otra aparición inesperada. Mientras que muchos de ellos inician el evento con relativa relevancia, pasan al olvido con finales rápidos para acabar recayendo todo el peso del arco argumental en una única pareja.

A pesar de este guion plagado de desaciertos, Bendis subsana con este cómic una de sus carencias argumentales más reiterativas en este tipo de proyectos: el ritmo. Si bien en otros grandes eventos Bendis abandonaba por completo el desarrollo de la historia en favor de una acción de grandes dimensiones y sin ningún criterio, en este cómic logra avanzar en la historia con cierto ritmo. Aunque el cómic comienza con su superlativa lentitud característica, Bendis consigue arrancar la trama y mantenerla en desarrollo durante gran parte del cómic, lo cual hace que el lector logre acabar el cómic con un mínimo de interés… A pesar del nefasto final que nos depara.

Bryan Hitch, quien había alcanzado en Marvel las mieles del éxito junto a Mark Millar y sus Ultimates, es el principal responsable de este evento, aunque no el único. Los Vengadores: La Era de Ultrón comienza con su particular estilo realista a un buen nivel, ayudando los colores de Paul Mounts y el entintado de Paul Neary a dar empaque al conjunto; pero conforme avanzan los números, el trabajo del equipo va perdiendo fuerza, destacando la carencia de precisión que va sufriendo el arte de Hitch. 
Una vez pasado el ecuador del evento, el testigo será recogido por Brandon Peterson y Carlos Pacheco, quienes aprovecharán un cambio de ambientación en el guion para imprimirle al cómic un estilo más comercial o pop. Por su parte, Paul Monts realizará un ingenioso coloreado basándose en qué línea temporal se desarrolle la historia.

A pesar de este elenco de artistas de renombre, el resultado del apartado gráfico es irregular, pues aunque el baile de dibujantes surte efecto al ayudar a diferenciar tramas, puede chocar debido a la diferencia de estilos. Además, en el cómic se recurre en exceso a una narración horizontal basada en compartir las dos páginas, al estilo splash-pages, que no aportan nada a la narración.

Actualmente, el cómic se encuentra publicado en nuestro país en 5 entregas de grapa de Panini que recogen los 10 números americanos, pero la editorial ya ha anunciado para Abril (mes en el que se estrenará Los Vengadores: La Era de Ultrón en los cines españoles) un tomo Marvel Deluxe que recopilará las 10 entregas más un tie-in con los Vengadores y, seguramente, una gran cantidad de extras. Un gran volumen en su típico formato de lujo con 320 páginas por 29.95.


Conclusión: Brian Michael Bendis crea un evento completamente falto de ideas originales, alargado en exceso, con errores argumentales y personajes sin desarrollar. No mucho más inspirados se encuentran Hitch, Peterson y Pacheco, quienes, a pesar de cumplir de forma digna, no llegan a destacar. Aun que logra entretener al lector, nos encontramos con un evento que pasará sin pena ni gloria.

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